También hay momentos en la vida en lo que todo te molesta, no por los demás, sino porque simplemente no te encuentras bien con la situación o contigo mismo. La gente repentinamente se vuelve muy pesada, repetitiva, todos te dicen lo mismo y parecen estar recordándote lo que tienes que hacer en todo momento. De verdad que puede llegar a ser realmente insoportable.¿Y por qué lo hacen? Nos preguntamos. Y no hallamos la respuesta. Bueno, no la hayamos gasta haber pasado esa fase. Entonces nos damos cuenta de muchas cosas: de los que han estado a tu lado, de los que no, de los que han pasado de ti... pero una muy especial, el el darte cuenta de lo que has madurado durante ese proceso, porque todo momento duro, si se sale adelante (porque siempre se sale adelante aunque no muchas veces como queremos), se lleva uno consigo un gran aprendizaje.
Pero todo hay que pasarlo.
Este dibujo identifica esa parte en la que estamos cabreados con todo y solo queremos gritar y mandar todo... bueno, ya podéis imaginaros dónde. Espero que os guste aunque sea de hace un tiempo.