lunes, 29 de julio de 2013

Libertad

Solo con oír acercarse se te remueve la conciencia. ¿Qué hacer? cuando por fin te decides a mirar te das cuenta de su belleza, su manera de caminar. ¿Y sus ojos? Sus ojos son como inmensos fondos en los que se podrían vivir mil aventuras.
Te dan escalofríos y el sonido que emite al caminar es como una cancioncilla que no puedes dejar de escuchar pero que relaja hasta lo más profundo de tu ser. todas sus formas te parecen inmensas.
De repente se detiene, como si una fuerza le impidiese moverse. Gira la cabeza y te mira. Tú das en ponerte nerviosa.
Sin esperártelo, agacha la cabeza en forma de saludo y sigue caminando por la inmensa llanura en la que se perderá.
Es un espíritu libre; el caballo.

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Vive la vida

Si lloras de noche porque se ha ido el sol, las lágrimas te impedirán ver las estrellas.